Desde hace siete años, Juana Alonzo Santizo está privada de libertad en una cárcel en Reynosa, Tamaulipas, en México. Fue detenida mientras se resguardaba en una casa en su rumbo a Estados Unidos.
Juana es originaria de Guatemala y pertenece al pueblo maya Chuj. Al ser detenida fue torturada y obligada a firmar una declaración auto incriminatoria. Pedro Alonzo, su tío, lamenta que muchos abogados que han contratado no han podido solventar la situación de Juana. “El peor delito que ella cometió fue haber nacido indígena, o haber nacido mujer”, aseguró su familiar.
Pedro ha solicitado ayuda en instituciones como Relaciones Exteriores, la ONU, derechos humanos, el consulado y la Embajada, pero ninguna ha dado una respuesta. El caso llegó al Colectivo Promotores de Liberación Migrante, quienes manifestaron que no hay mucha información sobre la situación de Juana, debido a que el Estado de México no difunde este tipo de hechos.
Por el momento están haciendo una campaña exigiendo la liberación de Juana, a través de la publicación de una carta abierta en redes sociales donde describen su situación e incluyen la resolución del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, que manda que se investigue el caso y se tomen medidas contra los responsables de la violación de los derechos de Juana Santizo.
Producción: Federación Guatemalteca de Escuelas Radiofónicas (FGER)
Periodista: Neida Solís
Imagen: ACNUDH