Nueve niñas de las provincias de Orellana y Sucumbíos, en la región amazónica de Ecuador, interpusieron una demanda judicial contra el Estado ecuatoriano por la quema de gas en mecheros al aire libre, una práctica común de la industria petrolera en la zona. Este caso, conocido como el “Caso Mecheros de la Amazonía”, captó la atención de organizaciones internacionales por ser único en el mundo, ya que no se tiene registro de otro grupo de niñas que haya demandado a su gobierno y ganado una acción judicial de esta magnitud.
Una de las organizaciones que mostró interés en el caso fue Amnistía Internacional. Tras conocer la demanda, la organización inició una investigación exhaustiva para verificar los argumentos presentados por las niñas. Luego de dos años de trabajo, Amnistía Internacional elaboró un informe titulado “Arde la Amazonía, Arde el Futuro”, donde se detallan los impactos ambientales y en la salud que genera la quema de gas en mecheros.
Amnistía Internacional verificó que al menos 52 mecheros están a menos de 5 km de centros poblados, una distancia potencialmente dañina para las comunidades locales y el medioambiente.
César Marín, director regional de campañas globales de Amnistía Internacional, señaló que la quema de gas en estos dispositivos sigue en aumento, a pesar de la sentencia favorable para las demandantes, y que el Estado ecuatoriano simuló el cumplimiento de la misma. La investigación de Amnistía confirmó que esta práctica afecta gravemente tanto a las comunidades como al entorno natural, generando un ciclo de contaminación que perjudica a la flora, fauna y, a las personas que habitan en la Amazonía.
Este caso no solo resalta la lucha por la justicia ambiental en Ecuador, sino que también pone en evidencia la responsabilidad del Estado en cumplir con sus compromisos internacionales en materia de derechos humanos y protección ambiental. Marín enfatizó que Ecuador tiene una oportunidad única para liderar con acciones concretas en la reducción de gases de efecto invernadero, eliminando los mecheros y mejorando la calidad de vida de las comunidades afectadas.
Informa: Víctor Gómez de Radio Sucumbíos, Ecuador.
