En Paraguay, el acceso a una salud íntegra para los pacientes con cáncer se encuentra seriamente comprometido debido a la precaria atención médica en uno de los centros especializados más importantes del país.
El Instituto Nacional del Cáncer (INCÁN) es objeto escrutinio público, debido a que numerosos pacientes denunciaron la escasez de medicamentos y demoras en la realización de estudios necesarios para sus tratamientos.
Ante esta situación crítica y la preocupación creciente, pacientes oncológicos se movilizaron para exigir respuestas. La ministra de Salud, María Teresa Barán, quien también enfrenta cuestionamientos por su gestión, confirmó la renuncia de Raúl Doria, director del instituto.
Juana Moreno, presidenta de la Asociación de Pacientes con Cáncer, enfatizó la necesidad de triplicar el presupuesto asignado al INCÁN. «No solo necesitamos medicamentos; es esencial dar mantenimiento a los equipos», declaró Moreno.
Asimismo, destacó la importancia de la comunicación y la prevención del cáncer para asegurar una ciudadanía sana e informada, capaz de identificar a tiempo posibles síntomas de la enfermedad.
Informa: Radio Fe y Alegría Paraguay.
