En América Latina y El Caribe, las comunidades, las tierras, las plantas y las semillas son atacadas, manipuladas genéticamente. Las semillas que ya no germinan son hijas de otras que han sido modificadas por científicos en laboratorios para crecer más rápido, para resistir a más enfermedades, para dar frutos más grandes. Y una misma especie se siembra en grandísimas cantidades pero… afecta también su fertilidad. Los países latinoamericanos que más tierras cultivables tienen en relación a su extensión son Argentina, México, Brasil, Panamá y Ecuador. En este capítulo presentamos las experiencias de resistencias y alternativas como la Red de Defensa del Maíz, en México, la Multisectorial contra la Ley Monsanto en Argentina y los pueblos originarios de Guatemala, que han logrado derogar la llamada «ley monsanto» y proponen una ley de protección de la biodiversidad.
Esta producción forma parte del Seriado Radiofónico «La vida grita: tierra, agua, pan», un análisis en clave continental que da cuenta de las resistencias y alternativas a los extractivismos en América Latina y El Caribe.