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Argentina: entrevista exclusiva con la nieta 126 recuperada por Abuelas de Plaza de Mayo.

20171206 - adriana nieta 126   abuelas de plaza de mayo argentina.jpg

Al igual que otros 500 bebés nacidos en el cautiverio de sus madres durante la última dictadura, ella fue robada por los represores y entregada a otra familia. Se llama Adriana, vivió 40 años con una identidad cambiada y esta semana pudo recuperar su verdadera identidad y saber que es hija de Violeta Ortolani y Edgardo Garnier, aún hoy desaparecidos.

En declaraciones al Foro Argentino de Radios Comunitarias emitidas en Contacto Sur, Adriana expresó que en su caso “el odio no pudo vencer al amor. A pesar de todo el dolor y sufrimiento que causaron a esa familia que me ha estado buscando y esperando, haberme recuperado les sirve para ir sanando un poco esas heridas. Yo como persona recupero la verdad y mi historia también.”

En Argentina la justicia comprobó que, además de la desaparición forzada de 30 mil personas, la dictadura argentina montó un plan sistemático de robo de bebés de aquellas prisioneras políticas que estaban embarazadas. En la mayoría de los casos ellas fueron asesinadas, sus bebés robados y entregados a otras familias, en algunos casos a los mismos represores.

De los 500 bebés robados ya fueron recuperados 126, gracias al trabajo de las Abuelas de Plaza de Mayo, promotoras del Banco Nacional de Datos Genéticos en el que se realizan los estudios correspondientes.

Adriana fue la última y su caso vuelve a hacer necesario el llamado para que todos aquellos jóvenes que sientan dudas sobre su verdadera identidad se pongan en contacto con las Abuelas. Como ella misma recalca: “lo mejor que te puede pasar es sacarte la duda y encontrarte con la verdad, por más grande o pequeña que sea”.

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Al igual que otros 500 bebés nacidos en el cautiverio de sus madres durante la última dictadura, ella fue robada por los represores y entregada a otra familia. Se llama Adriana, vivió 40 años con una identidad cambiada y esta semana pudo recuperar su verdadera identidad y saber que es hija de Violeta Ortolani y Edgardo Garnier, aún hoy desaparecidos.

En declaraciones al Foro Argentino de Radios Comunitarias emitidas en Contacto Sur, Adriana expresó que en su caso “el odio no pudo vencer al amor. A pesar de todo el dolor y sufrimiento que causaron a esa familia que me ha estado buscando y esperando, haberme recuperado les sirve para ir sanando un poco esas heridas. Yo como persona recupero la verdad y mi historia también.”

En Argentina la justicia comprobó que, además de la desaparición forzada de 30 mil personas, la dictadura argentina montó un plan sistemático de robo de bebés de aquellas prisioneras políticas que estaban embarazadas. En la mayoría de los casos ellas fueron asesinadas, sus bebés robados y entregados a otras familias, en algunos casos a los mismos represores.

De los 500 bebés robados ya fueron recuperados 126, gracias al trabajo de las Abuelas de Plaza de Mayo, promotoras del Banco Nacional de Datos Genéticos en el que se realizan los estudios correspondientes.

Adriana fue la última y su caso vuelve a hacer necesario el llamado para que todos aquellos jóvenes que sientan dudas sobre su verdadera identidad se pongan en contacto con las Abuelas. Como ella misma recalca: “lo mejor que te puede pasar es sacarte la duda y encontrarte con la verdad, por más grande o pequeña que sea”.

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