Crece la expectativa porque se ha retomado el diálogo entre el Gobierno de Colombia y el grupo gerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN) en La Habana en la isla de Cuba, debido a una acción impulsada por el gobierno del presidente Juan Manuel Santos.
Sin embargo, se presentan dificultades para lograr un acuerdo de cese al fuego definitivo y tampoco hay garantías de que puedan cumplirse los acuerdos que puedan concretarse, según representantes del grupo insurgente.
Según un comunicado del ELN, la delegación del gobierno no garantiza la «reciprocidad de las dos partes en el cumplimiento de los acuerdos» y tampoco «la ejecución de las transformaciones propuestas en el proceso y acordadas en la Mesa«.
La última guerrilla activa de Colombia aseguró que «persisten diferencias que impiden firmar un nuevo acuerdo de cese al fuego bilateral«.
Entre ellas se encuentra el hecho de que «el Gobierno no acepte el Derecho Internacional Humanitario (DIH) como el referente común para pactar acciones y acuerdos humanitarios», aseguran en su comunicado.
Consideran también que «el Gobierno se abroga la facultad de calificar hechos y actuar contra el ELN, sin previo informe y calificación del Mecanismo de Veeduría y Verificación«.
Para el ELN, con el cese al fuego se debe «avanzar en la solución de la persecución, asesinatos y judicialización a los líderes y lideresas de los movimientos sociales«.
Este será el último ciclo de diálogos durante el gobierno del presidente Juan Manuel Santos.
Foto: La FM