Unas 500 mil hectáreas fueron consumidas por los incendios forestales en el sur de Chile. Ahora, el gobierno se concentra en la ayuda a las personas damnificadas que superan las 7 mil. Muchas familias perdieron todo con el paso abrasador de las llamas, se estiman que van 1600 viviendas consumidas por el fuego y 25 personas fallecidas. Para el día viernes 17 de febrero se confirma que los incendios estuvieron prácticamente controlados.
Las víctimas de los incendios han evidenciado las vulnerabilidades de un sector de la población empobrecida. La recuperación implica mucho más que la reconstrucción de viviendas, ya que amerita una visión integral que considere la superación de las desigualdades estructurales de las zonas de afectación.
Entretanto la administración del presidente Gabriel Boric abrió el debate sobre la regulación del trabajo que realizan las grandes forestales, quienes reciben millonarios bonos del gobierno para sus empresas. Cuentan con privilegios, ya que no pagan royalty por sus actividades extractivistas, y además incentivan el monocultivo como negocio. Las empresas cuentan con una regulación blanda que les permite instalar monocultivos de pino o eucaliptus muy cerca de zonas pobladas, exponiendo una amenaza que conlleva un cambio en la biodiversidad, disputa por recursos hídricos para el riego y la degradación del suelo con desertificación.
Declaraciones de Nicolás Grau Ministro de Economía, Fomento y Turismo; Juan Sutil, ex presidente de la Cámara Nacional de Comercio; Marcos Hernández, Alcalde el Municipio de Galvarino.
Producción: Elias Muñoz Oyarzo, Tehuelche Noticias – Chile; María Cianci Bastidas, Coordinación General ALER.
