En Argentina los trabajadores y trabajadoras del Hotel Bauen de Buenos Aires consiguieron la ley de expropiación por la que tanto lucharon. Son 130 familias que desde marzo de 2003, hace casi 14 años, mantienen funcionando esa empresa en forma de cooperativa, tras la huida de sus antiguos dueños.
El Bauen es una de las más emblemáticas empresas recuperadas por sus propios trabajadores, tras la crisis de 2001. En aquellos tristes años, que hoy parecen querer volver, los empresarios cerraban sus empresas, en muchos casos mediante maniobras fraudulentas. Los trabajadores decidían quedarse en sus puestos y mantener funcionando las empresas en sus propias manos, dando lugar a un movimiento de empresas recuperadas que se extendió por todo el país.
Desde entonces una de las luchas principales es lograr la expropiación de los edificios para garantizar su continuidad.
Ayer el senado argentino aprobó la ley de expropiación del Bauen para que el estado nacional destine los recursos necesarios para ceder el edificio a la cooperativa de trabajadores Federico Tonarelli.
Los senadores que responden al presidente Mauricio Macri votaron en contra de la expropiación por lo que el temor es que el presidente pueda vetar la ley.
Sin embargo, se logró aprobar la ley y como dice María Eva Losada presidente de la cooperativa del Hotel Bauen, «nunca hay que bajar los brazos».
Un gran paso se dio ayer para salvaguardar los puestos de trabajo del Hotel Bauen. Un triunfo no menor en tiempos en que el estado privilegia el interés empresarial y no protege a los trabajadores.