A los 77 años de edad y con muchos padecimientos de salud, falleció en el hospital militar de Managua, el ex jefe del ejército, Humberto Ortega, quien estaba bajo la vigilancia de la policía, por órdenes de la pareja presidencial.
Desde muy joven llegó como guerrillero al Frente Sandinista, hasta convertirse en la década de los años 80 como el jefe del poderoso ejército, el más grande cuerpo militar de Centroamérica, del cual salió hasta que quiso y con numerosos bienes, del cual nunca se supo la fortuna exacta porque ninguna autoridad lo obligó a declarar su patrimonio.
En términos nicaragüenses, se dice que cayó en desgracia al confrontar a su cuñada, la vice mandataria Rosario Murillo y su hermano, el presidente Ortega, quienes lo mandaron a cerrar la boca y a vigilarlo con la policía, después de dar una polémica entrevista a un medio internacional en junio de 2024.
Humberto Ortega tuvo dos operaciones guerrilleras de gran responsabilidad y ambas salieron muy mal. La primera fue en 1967, cuando un comando sandinista intentó atacar al dictador Anastasio Somoza en Managua. Todo falló y cayó preso.
La segunda fue en 1969 en Alajuela, Costa Rica, dirigió un complot para intentar liberar de una prisión al fundador del Frente Sandinista Carlos Fonseca, de nuevo, todo falló y no solo cayó preso, sino que fue herido de gravedad. Lo salvaron en el Hospital San Juan de Dios de San José, Costa Rica.