El 24 de marzo de 1980 una bala asesina arrebató la vida a Monseñor Oscar Arnulfo Romero, el salvadoreño más universal. Según el informe de la Comisión de la Verdad de la Organización de Naciones Unidas (ONU), la orden de asesinar al obispo mártir fue dada por el mayor Roberto d´ Aubuisson.
A 41 años de su martirio, el legado del primer santo de El Salvador sigue vigente. Cabe mencionar que cada 24 de marzo ONU celebra el «Día Internacional del Derecho a la Verdad en relación con Violaciones Graves de los Derechos Humanos y de la Dignidad de las Víctimas», con el que hace homenaje a la memoria de San Romero, férreo defensor de las causas justas.
Compartimos más sobre la vida de San Romero y el trabajo que jóvenes de las comunidades eclesiales de base realizan para mantener viva su memoria.
Producción: Norma Ramírez, ARPAS – El Salvador
Foto: Archivo MUPI