Desde 1992, cada 22 de abril, se celebra el Día Internacional de la Tierra, establecido en la Declaración de Río, en Brasil. La Organización de las Naciones Unidas (ONU), dice en sus textos que “la Tierra y sus ecosistemas son nuestro hogar. Para alcanzar un justo equilibrio entre las necesidades económicas, sociales y ambientales de las generaciones presentes y futuras, es necesario promover la armonía con la naturaleza y el planeta”. En la provincia dominicana de El Seibo, los campesinos y campesinas de las distintas comunidades ven como quedan excluidos del acceso a la tierra, concentrada en pocas manos y mal utilizada para el monocultivo. Pese a la violencia y la exclusión que enfrentan mantienen la frente en alto para luchar por sus derechos.