El escrache es una protesta que surgió en Argentina cuando los represores de la dictadura gozaban de impunidad. Los hijos de los desaparecidos iban a los domicilios de los criminales de lesa humanidad y los señalaban frente a los vecinos del barrio en el que vivían, para ponerlos en evidencia pública. En Paraguay los apuntados son políticos de distintos partidos y no se salvó ni el presidente saliente, el empresario Horacio Cartes. Pero ¿hay en marcha un cambio ciudadano? ¿Es un despertar frente a políticas antipopulares? ¿Es posible esperar cambios a favor del pueblo, con el nuevo presidente, Mario Abdo Benítez, hijo del secretario privado del dictador Alfredor Stroessner? Informe de nuestro compañero José Pepe Ríos desde Misión FM en el sur del Paraguay.
