En Argentina el gobierno de Mauricio Macri alienta la xenofobia y el racismo hacia los inmigrantes. Primero fue con discursos racistas hacia bolivianos, paraguayos y peruanos; luego, con la eliminación de políticas públicas que beneficiaban a personas migrantes y ahora con una reforma por decreto de la ley de migraciones que facilita las expulsiones y que instala legalmente el prejuicio de que los migrantes son delincuentes y narcotráficantes. Para Marta Guerreño de la Unión de colectividades inmigrantes de Córdoba esto es una aberración. Así lo expresó a nuestros compañeros de Radio Sur.
La ley de migraciones argentina fue debatida ampliamente, aprobada por el congreso y considerada ejemplar en el mundo. La reforma impuesta por decreto por el presidente Macri facilita las expulsiones de personas con antecedentes penales que la ley ya establecía.
La ley reformada también facilita la detención de personas hasta que se decida su expulsión, se acortan los plazos para la expulsión que en algunos casos puede ser en 3 días, se permite hacerla sin aval judicial, se restringe el derecho de defensa y se abre la puerta para expulsiones por meras contravenciones como vender en la calle sin permiso.
Para la referente nacional de la Red de Migrantes Argentina, Lourdes Rivadeneyra, esto es volver a la ley del dictador Videla.
El argumento del gobierno es que los que vengan al país con buenas intenciones no tendrán problemas. Sin embargo parece una frase pensada para bolivianos, paraguayos y peruanos y no para otros extranjeros poderosos como Joe Lewis o Luciano Benetton que no llegaron al país con buenas intenciones y que se apropian de grandes extensiones de la Patagonia. ¿Serán expulsados del país Lewis o Benetton?
Nuestro compañero Pepe Frutos del Foro Argentino de Radios Comunitarias – FARCO nos informa:
Fuente: FARCO