El gobierno de Nicaragua calificó de negligencia la actitud del conductor de un autobús de transporte colectivo que recogió pasajeros en una terminal acuática en el departamento de Río San Juan y se precipitó al río causando la muerte de 9 personas.
La vicepresidenta de la república, Rosario Murillo, dijo que a través de las instituciones estatales se le daba la atención requerido a los sobrevivientes y a las familias afectadas por la tragedia.
Una de las fallecidas fue Ena Morales, de 39 años de edad, madre de 4 hijos, de los cuales tres son menores de edad; ella laborada en Costa Rica y hace un mes estaba en Nicaragua porque se había sometido a una cirugía de la cual habia salido exitosa.
Mireya Morales, madre de Ena, dijo que los testigos señalan al conductor del bus por imprudencia. La abuela de los huérfanos pidió a las autoridades apoyo para que el propietario del bus entregue una pensión para la manutención de sus nietos que quedaron huérfanos, debido a que ella ya no puede trabajar.
Los accidentes de tránsito en Nicaragua en lo que va del año han cobrado la vida de más de 500 personas y en las últimas 24 horas 13 personas han fallecido, por lo que las autoridades de tránsito han insistido en medidas preventivas y en campañas de concientización a los conductores para evitar tragedias.
Escuchemos el informe de Nelson Rodríguez, desde Radio Universidad:
