El presidente argentino recibió con honores a 1500 ejecutivos de las empresas más poderosas del mundo en el Foro de Inversiones y Negocios.
Dice que el encuentro empresarial, organizado por su gobierno, es para que esta vez sí venga la prometida lluvia de inversiones que no llegó cuando a principios de su gestión devaluó la moneda un 40 por ciento y le pagó a los fondos buitres.
En el Contacto Sur vespertino el economista Andrés Asiaín destacó que “la apuesta del gobierno es atraer a los grandes grupos multinacionales y no se apuesta por las pequeñas y medianas empresas nacionales que están en crisis”.
Asiaín aseguró que “por la alta tecnificación las grandes compañías mundiales generan muy poco empleo” y que las inversiones realmente productivas las llevan a lugares donde “está asegurada la explotación de los trabajadores”. Por eso propuso “tener un mercado interno fuerte y apostar por la integración regional”, dos aspectos dejados de lado por el gobierno macrista.
También opinó sobre estos 9 meses de gobierno de Mauricio Macri la secretaria general de la Confederación de Trabajadores de la Educación, Sonia Alesso. Para ella no hay dudas de que “las políticas que se han planteado hasta ahora han hecho que los pobres sean cada vez más pobres, la clase media retroceda en sus derechos y los sectores del poder económico tengan cada vez mayores privilegios”.
Este Foro de Inversiones y Negocios, que el gobierno de Mauricio Macri plantea como un encuentro clave para la llegada de inversiones, se está realizando en el imponente Centro Cultural Kirchner, construido por el gobierno anterior para que la población pudiera disfrutar en forma gratuita de variados espectáculos artísticos en salas de última generación.
En estos días de encuentro empresario el Centro Cultural y su zona aledaña están absolutamente vedados al acceso de la población.
El organizador del banquete empresarial, contratado por el gobierno argentino, es el marroquí Richard Attias, quién comparte con el presidente Macri su afición por las cuentas ocultas en paraísos fiscales. La diferencia es que Attias la tiene en Islas Vírgenes y Macri en las Bahamas.
¿Pueden empresas como Toyota, Coca Cola, Siemmens, JP Morgan o Golman Sachs, presentes en el Foro de Inversión y Negocios, ser la esperanza del pueblo argentino castigado en sólo 9 meses de retroceso social?