Según un reciente informe de la organización Campaña Emblema de Prensa (PEC), durante este año 2015 fueron asesinados 128 periodistas a escala mundial. La estadística pone en evidencia que no existió ningún tipo de progreso en la seguridad para los trabajadores de la prensa.
Los conflictos armados en países de Medio Oriente, la violencia en media docena de países de América Latina y los crímenes cometidos por integrantes o grupos terroristas fueron las principales causas del alto número de asesinatos, señala el informe. Medio oriente es la región con el mayor número de muertes violentas con un total de 38, seguida por América Latina con 31 y África con 26; Blaise Lempen, Secretario General de la organización, aseguró que la violencia contra la prensa no ha disminuido y resaltó que los últimos cuatro años han sido los más mortíferos de la década.
PEC señaló que durante los últimos diez años se han registrado los asesinatos de 1 mil 177 integrantes de la prensa, lo que significa que existe un promedio anual de 118 crímenes o el equivalente a 2.2 asesinatos por semana. Durante 2015, la organización reportó que el país con más crímenes fue Siria con 11; seguido de Iraq y México con 10; Francia, Libia y Filipinas con ocho; Brasil, India, Sudan del Sur y Yemen con siete; Pakistán y Somalia con seis; Honduras con cinco; así como Ucrania y Colombia con cuatro.
En la última década Siria encabeza también el listado de los países con más periodistas asesinados; desde que inició el conflicto en esa nación, se han reportado 86 crímenes y un número no cuantificado de reporteros desaparecidos, indicó la entidad. México es el tercer país con más muertes violentas de periodistas durante este lapso, 46 en total; esa nación vive una situación particularmente dramática debido a la guerra liberada por narcotraficantes, así como por la impunidad y la corrupción generalizada. Datos de la organización señalan que solo en 10 países se han registrado 415 muertes de las 643 ocurridas en los últimos cinco años, lo que demuestra que la violencia contra de los medios está concentrada geográficamente. Los periodistas no pueden simplemente dejar de hacer su trabajo por no viajar a las zonas peligrosas o por huir de combates; la comunidad internacional debe investigar cada crimen y luchar con mayor firmeza contra la impunidad, afirmó el director de PEC.
Fuente: CERIGUA